¿En qué consiste la Terapia psicológica?
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La decisión de acudir a terapia, a menudo, resulta complicada. En un principio, surgen muchas dudas sobre si sería conveniente o no, o si el problema que tenemos será lo suficientemente grave o no.
La terapia es un lugar seguro dónde poder aprender de ti mismo/a y de la manera de afrontar las situaciones de tu vida, no existen situaciones más o menos graves, sino más bien ganas de cambiar lo que uno/a está viviendo.
La mayor parte de las personas que recurren a tratamiento psicológico, lo hacen para poder hacer frente a alguna situación conflictiva, para resolver un problema en concreto, para conocer formas de mejorar las relaciones sociales o personales o para entender sus propios patrones conductuales, lo que ocasiona autoconocimiento sobre aquellas situaciones que generan emociones desagradables y aprender a manejarlas.
Aún hoy en día, existen dudas sobre lo que puede aportar una terapia psicológica. Durante un proceso terapéutico no se extirpa el dolor, se aprende a manejarlo de una manera más beneficiosa y a adquirir diversas estrategias de afrontamiento que pueda hacer que la vida sea más llevadera, así como reforzar habilidades y herramientas para afrontar nuevas situaciones.
Igualmente, ocurre con los miedos personales: No se erradican los miedos, se aprende a entender de dónde proviene, del por qué están ahí y cuál podría ser una forma más llevadera de estar con ellos. Pero, a menudo, ocurre que podemos encontrar a personas con unas expectativas muy altas sobre lo que significa acudir al psicólogo, y quieren solucionar un problema en 1 o 2 sesiones, las cuales solo abarcarían la fase de diagnóstico sin poder llegar a abordar en tan poco tiempo el tratamiento.
Es importante entender que durante el tratamiento psicológico se trabaja con las áreas más relevantes de la persona (pensamientos, emociones, conducta y sensaciones corporales), y que estas áreas, en muchas ocasiones, resultan desconocidas para la propia persona. No existen fórmulas mágicas ni cambios repentinos, sino que se van aprendiendo nuevas herramientas que ayudan a la persona en su día a día, y para aprender ya sabemos que es necesario ensayo-error.
Fases de la Terapia psicológica:
Un tratamiento psicológico se divide en las siguientes fases:
- La primera parte sería una entrevista inicial y una evaluación de las áreas personales del individuo.
- Una vez realizada la evaluación, se comunican los resultados, se proponen objetivos y se observan las áreas dónde se encuentran deficiencias para poder trabajar sobre ellas, y también aquellas que puedan ser unas buenas estrategias de afrontamiento para poder potenciarlas y utilizarlas como herramientas que nos ayuden.
- Y tras estas primeras sesiones de entrevista, evaluación y devolución de los resultados, se pasa a elaborar un tratamiento individualizado y personalizado.
En el caso de tratamiento para niños/niñas y adolescentes, la situación es un poco más compleja, ya que el papel de los padres en terapia es un aspecto clave para un tratamiento exitoso. A menudo, existe la falsa expectativa de que el terapeuta trabajará con el niño/a o adolescente y que probablemente el problema se solucionará fácilmente. Sin embargo, solo desde un tratamiento global, que pueda tener en cuenta todas las dimensiones que afecten a la vida del adolescente se podrán conseguir resultados positivos.
¿Cuál es mi papel como paciente en la terapia?
La predisposición y el compromiso del paciente es un factor relevante en el éxito de la terapia. A veces, aunque una persona acuda a terapia, puede que se muestre reacio a colaborar, a veces porque la persona cree que el problema se va a solucionar rápido o porque buscan una solución rápida y milagrosa que no implique un exceso de esfuerzo por su parte. En el proceso terapéutico la voluntad para hacer cambios, por parte del paciente, es un factor muy importante y el conocimiento de la manera en la que percibe, siente y se comunica con su entorno y con él mismo también.
¿En qué consiste la Terapia cognitivo-conductual?
La terapia cognitivo conductual es la orientación con una gran cantidad de estudios científicos que avalan su eficacia en diferentes tipos de problemáticas y de intervenciones.
El objetivo con dicha terapia es identificar las situaciones problemáticas de la vida, observar con atención los pensamientos y las emociones que surgen alrededor del problema, y el tipo de conducta que se elige como producto de los pensamientos y las emociones. En este aspecto, la terapia cognitivo-conductual ayuda a identificar aquellos errores de pensamientos o pensamientos negativos e inexactos que están generando un tipo de emoción u otro y poder observar las evidencias que avalan esos pensamientos.
Es un tipo de terapia que ayuda a conocerse a uno mismo, a entender la problemática y el porqué de la conducta que elegimos. Ayuda a la regulación de las emociones y a cuidarse a uno/a mismo/a y en general ayuda a aprender habilidades para afrontar las situaciones de la vida con mayor eficacia para la propia persona y su alrededor.
¿Crees que ha llegado el momento de acudir a terapia? Puedes concertar tu primera cita en el apartado contacto de Clínica de psicología Psilex. Estaremos encantadas de poder ayudarte.
