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El área laboral es considerada una organización social en la que se regulan las relaciones entre individuos y grupos en relación al desarrollo de las tareas asignadas. No obstante, en el contexto del trabajo también se crean relaciones interpersonales que, frecuentemente, no reciben atención pues no se relacionan de manera directa con la ejecución de las tareas remuneradas, pero sí pueden desembocar en problemas internos de gran relevancia más allá de simples discusiones.
Asimismo, la literatura científica ha revelado que la presencia de estos “problemas internos” trae consigo distintas disfunciones que tendrán su efecto no solo en los trabajadores (insatisfacción en el trabajo, baja motivación, clima laboral pobre, etc.), sino además en el funcionamiento general de la empresa (abandono del trabajo, disminución del rendimiento, absentismo…).
Qué entendemos por Mobbing
Este conjunto de problemas que se derivan de las relaciones interpersonales entre miembros de la empresa de trabajo es lo que se ha denominado “Mobbing”. Dicho concepto procede del verbo anglosajón “to mob” y significa asaltar, acosar, hostigar.
En 1996, Leymann expresó que en este concepto de acoso laboral se lleva a cabo una comunicación intimidatoria y sin ética que cierto/s individuo/s dirigen sistemáticamente contra otro trabajador y, tras esto, se coloca a la víctima en una posición de indefensión en la cual es mantenida de forma activa.
La situación de acoso en la que se ejerce una presión al empleado/a en el lugar de trabajo, presenta la finalidad de desestabilizar emocionalmente a la víctima para menoscabar su capacidad laboral y “librarse de él” en el sentido de ser despedido de la organización empresarial o forzando su marcha voluntaria.
Formas de expresión del Mobbing
Los expertos analizan las diversas actitudes y conductas llevadas a cabo por los acosadores en unos 45 comportamientos de tipo hostil, que podemos recoger en la siguiente clasificación:
➢ Atentar contra su reputación y/o dignidad: incluye hacer comentarios ofensivos, ridiculizar, reírse en público de la persona e, inclusive, cometer acoso sexual.
➢ Conductas contra el ejercicio del trabajo: ordenar trabajo excesivo y de dificultad, repetitivo, aburrido y/o innecesario; privar de realizar ciertos trabajos, encomendar trabajos en contra de sus convicciones morales, etcétera.
➢ Manipular la información o comunicación con la víctima: amenazar, criticar, reprender, no dirigirle la palabra, ignorar sus opiniones o presencia, mantener ambigüedad de rol (ej. no informarle de sus funciones, exponerlo a situaciones de incertidumbre constante…), etcétera.
➢ Situaciones de Inequidad: diferencias de trato, distribución desigual del trabajo o diferencias remunerativas para las mismas responsabilidades, entre otras.
Origen del Mobbing
El mobbing se considera una forma de estrés laboral con la particularidad de que su origen no se sitúa exclusivamente en razones directamente relacionadas con el trabajo o su organización.
Esto es, la etiología del mobbing recae en las relaciones interpersonales establecidas entre los individuos que conforman cualquier organización laboral.
Es necesario resaltar la multicausalidad del conflicto pues sería muy difícil señalar un único origen en este fenómeno de acoso psicológico en el área laboral.
Un aspecto fundamental a considerar en estos casos será la gestión de los conflictos por parte de la organización y sus miembros. En esta línea, destacan dos tipos de superiores: las personas que participan de manera activa en el conflicto contribuyendo al estigma en la víctima y, por otro lado, los directivos que simplemente niegan la problemática surgida.
La forma de acoso más prototípica suele surgir de forma poco significativa a través del cambio repentino en la relación de ciertas personas que, en un principio, era neutra o positiva.
Cambios tecnológicos, organizativos o políticos suelen estar presentes en la empresa en el momento de darse estas discusiones entre trabajadores. La persona hostigada empieza a recibir críticas en relación a su trabajo cuando previamente era adecuada y sin objeto de atención.
La víctima no comprende en un primer momento las actitudes que empiezan a llevarse a cabo contra ella y surge cierta dificultad para defender su postura. A través de las conductas del agresor/es, se desencadena ansiedad en el hostigado/a, lo que causa en esta persona una actitud defensiva que habitualmente propicia a su vez nuevas agresiones.
Con el tiempo, la agresión se mantiene hasta el punto de volverse cotidiana y adoptar diversas formas, todas con la intención de estigmatizar y desacreditar públicamente al hostigado/a. Esto trae consigo el desequilibrio psicológico de la víctima y el consiguiente abandono del puesto de trabajo.
La parte Social del Mobbing
La literatura más reciente hace hincapié en una Psicología Social del mobbing ya que, para que ocurra el fenómeno del acoso psicológico en el ámbito laboral, debe existir una complicidad activa o pasiva por parte del grupo y, en ocasiones, por parte de la organización del trabajo en su conjunto.
Es el grupo quien ejecuta estos comportamientos y es la organización la que facilita este fenómeno, con frecuencia al servicio de las demandas patológicas del acosador.
En otras palabras, si no se dieran determinadas características propias del grupo, el acosador únicamente sería un individuo frustrado, acomplejado, cobarde, envidioso y resentido entre tantos otros que acabaría viviendo aislado, o bien, volcaría sus esfuerzos en imponer su desequilibrio psicológico a través de otras vías, generalmente violentas y poco democráticas pero, en ciertas ocasiones, constructivas y creativas. De esta forma, desaparecería el mobbing.
Consecuentemente, el acosado tampoco existiría pues los supuestos rasgos patológicos que ciertos autores se esfuerzan en delimitar son únicamente la consecuencia natural del propio proceso del acoso. Ante esta situación, probablemente cualquier persona desarrollaría esos “rasgos de personalidad” propios del acosado pues solo son reacciones a la situación contextual concreta de acoso.
¿Qué trae consigo el Mobbing?
Tras conocer el mobbing y sus implicaciones, surge la necesidad de examinar distintas formas de prevenir las devastadoras consecuencias que acarrea este tipo de acoso laboral.
Las consecuencias de una estructura social debilitada se manifiestan a todos los niveles y en todas las direcciones:
- Dentro de los grupos y equipos de trabajo: aislamiento, falta de apoyo social, competencia…
- Entre diferentes niveles jerárquicos: dominación, acoso sexual…
- En relaciones extremas con las organizaciones: conflictos con usuarios y clientes, violencia en el trabajo, menor calidad del servicio, pérdida de contacto, deterioro de la imagen corporativa…
Asimismo, las consecuencias del Mobbing tienen serias repercusiones en las siguientes áreas:
▪ La víctima
▪ La organización de trabajo
▪ El apoyo familiar y social
▪ Comunidad
Concretamente, entre las consecuencias a nivel psicológico para la víctima destaca la ansiedad junto al miedo continuo y el sentimiento acentuado de una amenaza, que suele generalizarse a los distintos ámbitos de su vida a parte del laboral. Además, están presentes los sentimientos de frustración, impotencia, fracaso, apatía y baja autoestima. Por otro lado, aparecen distintas distorsiones cognitivas, problemas de atención y falta de concentración.
En conclusión…
El “mobbing” es un problema psicosocial cuya prevalencia se compone de cifras alarmantes dentro de la población en actividad laboral de forma que origina terribles consecuencias en los trabajadores acosados.
A la perversa naturaleza de los medios empleados, los inmorales objetivos perseguidos y las fatídicas consecuencias para la salud y bienestar emocional para la persona hostigada, deben sumarse los daños colaterales creados en las familias de las víctimas, el descenso de eficacia de la organización laboral y el valor económico que supone para los recursos sociales del país.
Es deber de todo el que pueda ofrecer conocimientos y técnicas de afrontamiento de la situación de acoso en el trabajo (empresarios, sindicatos, investigadores, legisladores, colegios profesionales, etc.) actuar en contra del ejercicio del poder en las relaciones asimétricas que se manifiesta a través del acoso psicológico.
¿Has vivido algún tipo de situación de acoso en el trabajo? ¿Lo has presenciado hacia otras personas? ¿Has sido víctima de acoso laboral o mobbing? Contacta con Clínica de Psicología Psilex, estaremos encantadas de ayudarte.